*Ramón Mª Calduch es economista y abogado, antropólogo especializado en medicina, presidente de la European Chamber of Commerce for TCM y vicepresidente del Consejo de asesores de la Federación Mundial de MTC junto con varios rectores de Universidades de MTC de China. También es vicepresidente de la Fundación Europea de MTC y de PEFOTS y Doctor Honoris Causa por la Constantinian University.
Estimados compañeros,
Desde la reflexión y desde la autoridad que me da el haber dedicado muchísimas horas, junto con los directivos y profesionales de la Fundación Europea de Medicina Tradicional China (MTC), del análisis y aportaciones (además de infinidad de reuniones, tanto internas como en la Conselleria y el IES) al proyecto de decreto de Terapias Naturales, quiero haceros una serie de comentarios cuyo objetivo es situar el tema que nos ocupa en el contexto actual y la realidad ante la que nos encontramos.
En estos días estamos recibiendo muchos e-mails por parte de miembros del Practitioners Register de la Fundación Europea de MTC, preocupados por ciertos aspectos del contenido del proyecto de decreto, cosa que agradecemos y que, por supuesto, tenemos en cuenta a la hora de analizar las alegaciones que presentaremos dentro del plazo de dos meses que se nos ha dado. En este sentido deciros que la Fundación Europea de MTC ha creado un Comité altamente cualificado para dicho tema. Deciros también que el Practitioners Register, con más de 700 miembros, es la única organización que defiende exclusivamente la Medicina Tradicional China, junto con la SAC. La Medicina Tradicional China tiene unas características (etiología y sistema de diagnóstico) que le son propias y de cuyo atributo no gozan el resto de terapias que se pretende regular. Por tanto, tenemos unas características que nos diferencian de los demás y que debemos defender con criterios científicos, por otra parte aceptados internacionalmente.
Entrando ya de lleno en la cuestión del decreto, deciros que estamos ante un momento delicado en el que debe prevalecer la reflexión, la tranquilidad, la negociación, la argumentación, etc… y no la crispación. Por supuesto que hay aspectos del proyecto de decreto con los que no estamos de acuerdo. Estamos seguros de poder introducir algunos cambios, pero también sabemos que habrá que hacer algunas concesiones. El tema no acaba aquí y con posterioridad al decreto habrá que seguir trabajando. Eso sí, desde otra perspectiva y otra realidad. Lo que no compartimos es que sea mejor continuar en una situación de alegalidad, como propugnan algunos. Tampoco aceptamos posicionamientos como el del Colegio de Médicos.
A título ilustrativo os reproduzco un artículo aparecido ayer en el periódico La Vanguardia, que os ruego leáis en profundidad:
EL COL.LEGI DE METGES RECHAZA EL DECRETO DE TERAPIAS NATURALES
Los médicos estudian impugnar la norma por creer que contradice varias normativas y la mitad de los terapeutas también piden que se revise.
MARTA RICART - 23/03/2006
BARCELONA
La regulación de las terapias naturales propuesta por el Departament de Salut no gusta a los médicos ni a la mitad de terapeutas, que se declaran decepcionados. El Col.legi de Metges de Barcelona (COMB) estudia impugnar el decreto, cuyo borrador presentó Salut hace unos días. Una plataforma de entidades de terapeutas y centros formativos pide igualmente la revisión o retirada del decreto y amenaza con movilizaciones de protesta.
La consellera Marina Geli quiere culminar una ordenación - inexistente en España- que empezó hace siete años y no lograron zanjar sus dos antecesores. Salut plantea la regulación en Catalunya de la formación y la práctica de la acupuntura y terapias orientales afines (fitoterapia), la homeopatía, las terapias naturistas (basadas en plantas, agua...) y las manuales (osteopatía, reflejoterapia...). Los terapeutas en activo deberán acreditar conocimientos y habilidades mediante un examen. Los evaluará el Institut d´Estudis de la Salut (IES), dependiente de la Conselleria. Ésta autorizará los centros de terapia. El IES acreditará además los centros de formación en terapias naturales y formadores. Para acreditar estudios y practicantes, el IES se basará en unas guías - una para cada grupo de terapias-, elaboradas con el colectivo, y que establecen conocimientos que debe tener un terapeuta, técnicas o para qué casos está indicada la terapia.
El Col.legi de Metges de Barcelona, (COMB), con 600 médicos acupuntores, homeópatas y naturistas inscritos, asegura que comparte el objetivo de Geli de regular el sector, pero rechaza la propuesta de Salut por considerar que abre la puerta a la práctica sanitaria a personas no cualificadas. Los médicos defienden que, para garantizar la salud, la acupuntura sólo puedan practicarla médicos, veterinarios, enfermeros o fisioterapeutas (profesionales sanitarios) y la homeopatía, médicos. Otras terapias permitirían ejercerlas a terapeutas no sanitarios pero si cualquier diagnóstico previo de patología lo hace siempre un médico.
Salut prevé que se pueda acreditar a terapeutas sin titulación sanitaria. "No podemos reservar las terapias naturales a médicos", admite Rafael Manzanera, director de Recursos Sanitarios.
Isabel Giralt, presidenta de la sección de médicos acupuntores del COMB, explica que "el decreto se salta la ley de Profesiones Sanitarias y el decreto de Centros Sanitarios. Da competencias sanitarias, aunque no las llame así, a no sanitarios. Y los centros de terapias naturales pueden ser no sanitarios y no estar obligados a tener un profesional sanitario al frente. En cambio, les exige que cumplan la normativa de riesgos sanitarios o de eliminación de residuos sanitarios".
Diagnóstico
"El decreto dice que quien se acredite para ser terapeuta, le habilita para valorar el estado del paciente y aplicar la terapia correspondiente. Eso es un diagnóstico encubierto", agrega Giralt. Manzanera replica que el decreto agrega que "la acreditación para aplicar terapias naturales en ningún caso autoriza a los no sanitarios a realizar actividades reservadas a los profesionales sanitarios". El director de Salut añade que, a la práctica, nadie va a un terapeuta si se siente mal, sin haber visto ya antes a un médico. El COMB cree que el decreto se aleja tanto de su postura que no bastarán las alegaciones y estudia impugnarlo.
No menos descontentos que los médicos están unos 3.000 terapeutas, lo que supondría la mitad del colectivo - Salut lo cifra en 6.000 terapeutas-, que dicen agruparse en la Coordinadora de Centres Formatius de Teràpies Naturals y la Coalició d´Entitats Professionals de Teràpies Naturals-Federació Catalana. Esta plataforma - asegura representar a centros que han formado al 70% u 80% de terapeutas en activo- pide que "se replantee la acreditación propuesta de terapeutas o se retire el decreto" por considerar que la regulación que plantea Salut "no responde a la realidad, no se hace desde el pluralismo y es intervencionista", según Gustau Pau, portavoz de este sector de terapeutas.
Este sector sostiene que las guías que determinarán la formación y la competencia de los terapeutas se han elaborado a criterio de sólo unos pocos expertos y centros, sin tener en cuenta las aportaciones del resto. Hablan de favoritismos de los responsables de Salut. Manzanera rechaza la acusación y afirma que se ha consultado a cien expertos. "Estamos abiertos a todas las sensibilidades y acuerdos", agrega.
Pau defiende que como el IES es una institución médica y tiene un enfoque médico, no debería evaluar las terapias naturales, que se rigen por un enfoque distinto a la medicina convencional. "No es que no queramos ser regulados o evaluados, pero no puede ser con estos criterios", asegura Pau.
Fuente: La vanguardia, 23/03/2006
Como os habéis podido percatar hay dos posiciones perfectamente diferenciadas y nosotros no aceptamos ni una ni otra. Sencillamente, desde la tranquilidad y con argumentos sólidos y contundentes hay que negociar la introducción de cambios en el actual proyecto de decreto, sin poner en peligro que el mismo vea la luz. Todavía me acuerdo de la etapa vivida cuando me reunía en el Parlamento Europeo con Paul Lanoye para colaborar en su proyecto de Directiva y como al final quedó en muy poco por la actitud intransigente del Grupo de Atenas (médicos occidentales) y de los extremistas del Grupo de los Verdes (al que por cierto pertenecía Paul Lanoye). Esto no debe suceder en esta ocasión y, sin renunciar a introducir los cambios que consideramos justos, no seremos nosotros quienes pongamos en umbrete a una Consellera (Marina Geli) y a un Director General (Rafael Manzanera) que han tenido la valentía de abordar un tema como el que nos ocupa, con criterios científicos y rigurosos y desde la perspectiva de la realidad social existente no sólo en Cataluña, sino también en España y en toda Europa. Otros sólo hablan pero ni se mojan ni trabajan.
A título de ejemplo os diré que una de las cuestiones más criticadas es que la acreditación a los profesionales valdrá por diez años y que tendrán que evaluarse de nuevo para renovarla. Pues bien, ésta es la tendencia a nivel europeo para todos los que actúan en el ámbito de la salud. También para los médicos occidentales será obligatorio en un futuro, aunque se llegue a acuerdos con sus corporaciones profesionales para implantar un sistema de evaluación continua que sustituya la evaluación cada 10 años. A mí particularmente este tema no me preocupa en absoluto, siempre que se introduzca la modificación que pensamos plantear de que “para mantener la acreditación se deberá realizar una prueba de evaluación cada diez años o acreditar la realización anual de un mínimo de créditos en formación continua que se regulará reglamentariamente”.
Evidentemente, al igual que el ejemplo que os acabo de poner, hay otras cuestiones relativamente fáciles de resolver. Otras no lo son tanto, pero desde aquí os quiero pedir tranquilidad y confianza (la misma que nos habéis demostrado siempre) en las personas que estamos trabajando en este tema, en defensa de los intereses de todos vosotros, los profesionales de la MTC. El hecho de ser la organización que agrupa, con mucha diferencia, al mayor número de profesionales de la MTC nos obliga a ser rigurosos, dialogantes, prudentes y reflexivos, a la vez que exigentes en las cuestiones irrenunciables. Os pedimos tranquilidad y confianza y que escuchéis a todo el mundo pero que no hagáis caso de aquellos que se sitúan en el extremo, buscando un protagonismo personal que no se merecen, sabiendo de la buena fe de todos vosotros y del descontento general existente en el sector. No se trata de ser intransigentes en base a cuestiones concretas sino de buscar soluciones globales que nos permitan abandonar la alegalidad en la que estamos instalados y poder mirar con optimismo el futuro, ya que, como os he dicho antes, este tema no acabará con la publicación del decreto, sino que habrá que seguir trabajando.
Reiteraros que son bienvenidas vuestras observaciones, críticas e indicaciones y que van a ser tenidas en cuenta en el trabajo que estamos realizando, pero que nadie espere por nuestra parte una actitud de crispación ni de bloqueo para con las autoridades catalanas, por la sencilla razón de que estamos razonablemente convencidos de ver incluidas en el texto final del decreto la mayoría de las modificaciones que en su momento plantearemos, no sólo porque estarán bien argumentados sino porque serán justas y ajustadas a derecho.
Como ya sabéis, para contactar con nosotros y hacernos llegar vuestros comentarios podéis dirigiros al email: pr@mtc.es.
En la confianza de que este escrito merecerá una reflexión por vuestra parte, aprovecho la ocasión para saludaros muy cordialmente.
Ramon Maria Calduch
Vicepresidente de la Fundación Europea de MTC