Fundación Europea de Medicina Tradicional Complementaria e Integrativa
Queríamos saber si la acupuntura se transforma y evoluciona o si permanece milenaria e inalterable. Recurrimos a alguien con 17 años de experiencia en la medicina tradicional china.
Tomamos un té verde con José Joaquín Segura, que estudió MTC en la Escuela Superior de MTC y actualmente es miembro de Practitioner's Register, mientras hablamos largo y tranquilo sobre la energía, el movimiento, el dolor, el pragmatismo de los doctores orientales y la necesidad occidental de medirlo todo. La acumulación de energía, por ejemplo, se mide en Occidente como señal eléctrica. Hablamos de endorfinas, psiconeuroendocrinología y craneoacupuntura. También del Qi. Y del Qi gong, arte o ciencia, ejercicio o meditación que consiste en canalizar la energía a través de los meridianos de la acupuntura mediante un conjunto de ejercicios mentales o psíquicos conscientes. Pero sobre todo, quedó muy claro que para saber si se debe aplicar la técnica de acupuntura a un paciente, se han de tener sobre la mesa del médico la analítica, los TACS, las resonancias efectuadas por la medicina occidental. En Oriente, las dos medicinas se complementan. Aquí, debemos saber hacerlo.
- Algunos dicen que la acupuntura es un puro placebo, que sólo actúa por sugestión del paciente.
- Sin embargo, es una técnica terapéutica que funciona en Oriente desde milenios. Y se practica en Occidente desde hace 200 años. La cuestión radica en que no existe una explicación occidental para lo que representa la acupuntura. Actúa sobre la sensación de dolor que transmite el cerebro. Los maestros orientales son muy pragmáticos y si algo funciona, es válido. Occidente pide explicaciones. Hay países muy abiertos a la medicina tradicional. Tanto en su aplicación como en su estudio. Estados Unidos lo es sobremanera. Otros no tanto. La acupuntura es de gran ayuda en el tratamiento del dolor y el estrés.
- Entendiendo el dolor como...
- Un estancamiento o, al revés, una aceleración, una acumulación excesiva, de la energía.
-Según Oriente, somos movimiento.
- Pero no sólo Oriente. Recuerda la idea de Heráclito y ese río cuyo agua no deja de moverse, de avanzar, de circular. Si esa energía que somos, si ese movimiento que somos, se detiene; si la energía se concentra en un lugar, si desaparece de otro, surge el dolor.
- Lógico. Como el agua estancada pudre las cosas. Y se pudre ella.
- Entonces lo que hace la acupuntura es muy simple: equilibra y regula el flujo de esa energía. Donde sobra, rebaja. Sin olvidar jamás que hay situaciones patológicas donde el acupuntor no debe intervenir. Sin olvidar tampoco que la materia que se ve es el siguiente umbral de la energía que no se ve y que provoca muchos de los procesos químicos que conforman a todo organismo vivo.
- Ha nombrado antes el estrés. ¿Cómo entiende la medicina tradicional china algo que parece tan occidental y moderno como eso?
- Muy sencillo, como lo que es: una falta de adaptación o aceptación al ambiente que te rodea; inadaptación que altera tu estabilidad emocional, psíquica y física.
- Supongo que esa falta de adaptación al entorno...
- Provocada por una separación, por el paro, por un exceso de trabajo, por una muerte...
-... Producirá un desplazamiento de la energía, de nuestro movimiento. Desplazamiento, acumulación. Estancamiento. Aceleración.
- Justo. Y ahí aparece la acupuntura. Para equilibrar, reajustar. Donde falta, pone. No ayudamos al tratamiento de la ansiedad o de la depresión leve porque filosofemos sobre el ying y el yang o porque hablemos de sabidurías ancestrales sino porque podemos restituir el flujo correcto de esa fuerza que nos mantiene vivos.
- En contacto, imagino, con la tierra que pisamos y el cielo que miramos.
- Claro. Dicen que los factores que provocan esos desajustes de energía son genéticos, medioambientales (incluida la contaminación) alimenticios y psíquicos.
- En algún lugar hemos citado la psiconeuroendocrinología y la craneoacupuntura. ¿Qué son?
- La primera implica una nueva forma de entender la absoluta interrelación de nuestro cuerpo como organismo vivo. Estudia, analiza, interpreta cómo la acción del pensamiento, los estímulos y procesos psicológicos, actúan sobre las acciones de las neuronas que, a su vez intervienen sobre la actividad hormonal, cuya disfunción puede atacarnos física y psicológicamente. Una de las nuevas maneras de la acupuntura, la craneoacupuntura, se centra exclusivamente sobre la cabeza, el rostro, incide en el córtex mismo, ayudando a tratar esas disfunciones neuro-hormonales que llegan a afectar a la psique, al sistema nervioso, a nuestro ajuste de energía...
- Por tanto, la medicina tradicional oriental y sus técnicas... evolucionan.
-Muchísimo. Lo hacen en China, Japón, Corea. Siempre en contacto con la Medicina Occidental.
Fuente: Diario Vasco (20 de Noviembre, 2008)